Hoy en día, las tareas que se llevan a cabo mediante una computadora, se realizan por la creación de un software de aplicación. Esto quiere decir que son programas planteados para facilitar esta labor a los usuarios, sobre todo, cuando son tareas muy precisas que necesitan de un sistema especializado.
Según su funcionalidad, el software de aplicación se puede clasificar en dos modelos de programas:
- Básicos: Las aplicaciones que están vinculadas al correcto desarrollo del ordenador y por lo general, muestran un apariencia más técnica.
- De productividad: Se concentran en dar una mayor facilidad a los usuarios, con aplicaciones más precisas y determinadas que presentan un servicio exclusivo.