Ejemplos de cartas a un hermano

Todo el mundo debe saber que nunca está mal ser agradecido con las personas que están en los buenos y en los malos momentos y que no dudan nunca en brindar su máximo apoyo. De esta forma, lo que se muestra es el sentimiento de agradecimiento que uno tiene respecto al otro por estar siempre a su lado y poder contar con el, mostrando lo importante que es en su vida.

Muchos tienen dificultad para decirlo cara a cara, por eso utilizan otra vía comunicativa como la escrita, hecho que conlleva a poder mostrar todos los sentimientos que uno guarda dentro y decir gracias, una palabra con 7 sílabas pero que realmente reconforta.

Una de las personas más imprescindibles en la vida del ser humano es el hermano, por eso en este artículo se van a realizar dos ejemplos de cartas a un hermano con función emotiva.

Las cartas a un hermano sirven para expresar todo lo que uno siente

Ejemplo 1

A mi amado hermano:

Te escribo esta carta para agradecerte todo lo que has hecho y lo que sigues haciendo por mi, por estar en los momentos en los que no encuentro ninguna salida, por apoyarme en todas las decisiones importantes de mi vida, y por tu responsabilidad, tu humildad y tu generosidad.

Sabes que eres mi hermano, mi confidente, mi amigo de toda la vida, la persona que siempre me ha tendido una mano, que siempre me ha guiado con su gran experiencia y que me ha dicho las cosas tal como son. Por todos estos motivos, quiero manifestar que eres mi ejemplo a seguir y que siempre te tendré como mi gran referente, una persona que es capaz de todo por mi.

Termino esta carta pidiendo que siempre estés bien protegido y acompañado como tu has hecho conmigo y deseo con todas mis fuerzas que sigas cosechando éxitos.

Eternamente agradecido.

Ejemplo 2

Querido hermano:

Quiero decirte todo aquello que llevo tiempo guardado dentro de mí y que necesito que lo sepas porque eres lo mejor que me ha pasado en la vida.

Nuestra vidas han tomado rumbos diferentes para luchar por lo que deseamos, tú ahora estás en Sevilla y yo aquí sigo en Buenos Aires, nuestra ciudad de la infancia. Tú has ido en busca de los valores más esenciales que son la honestidad, la labor en equipo y el altruismo, un hecho que me ha demostrado la gran persona que eres, por favor sigue así.

Lo que más necesito decirte es que la distancia no hace el olvido y que por muy lejos que estés siempre voy a sentir que sigues a mi lado como lo has hecho durante 22 años. Echo de menos tus sonrisas, tus abrazos y tus sabias palabras, también se que algún día volveremos a vernos, ese día en el que el tiempo se detendrá y seremos los niños que siempre hemos sido.

Gracias por todo los valores que me has inculcado ya que hoy en día soy así gracias a ti.

Te extraño.

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