Una de las partes de las matemáticas que se desarrolló a partir de finales del siglo XIX va enfocada a la teoría de conjuntos, que ha ido añadiendo diversos conceptos como la inclusión, la pertenencia y la unión. En este caso nos centramos en la unión de conjuntos, es decir, una de las operaciones más sencillas que se basa en la unión de los elementos de 2 o más conjuntos para formar uno nuevo.
No solo se hace uso de él en este ámbito, también en el lenguaje común, donde hablar de un conjunto es algo más impreciso porque las opiniones son mucho más variadas y no existe un acuerdo absoluto de quienes van a formar parte de ello.