Es importante saber que ciertos hábitos saludables se deben realizar por propia iniciativa, como una agrupación de pautas dirigidas al bienestar físico y mental, por ejemplo, la buena alimentación, la realización de ejercicio físico y el promover el pensamiento positivo. Todas ellas se conoce por ser manifestaciones del autocuidado y se actúa de esa forma al ser un instinto de supervivencia para protegerse y conservar la propia vida.
No importa en qué etapa de la vida se encuentre uno, hay una cosa fundamental y es el autocuidado, es decir, cuidarse y cultivarse a uno mismo en un sentido integral, centrándose sobre todo en el alma y el conocimiento del yo.
A continuación exponemos distintos ejemplos del autocuidado para obtener más información acerca de este concepto de especial relevancia.
Hacer ejercicio
Hacer ejercicio es una de las cosas más importantes, por lo que es necesario seguir una rutina diaria en la que se cuide el cuerpo para obtener una buena salud y condición física. Lo ideal es realizar ejercicios aeróbicos (correr, nadar o montar en bici) y anaeróbicos (levantamiento de pesas o abdominales).
Alimentarse correctamente
Adoptar una dieta balanceada y variada según las necesidades de cada persona es elemental en el autocuidado. También es fundamental señalar qué se recomienda comer para evitar ciertos problemas de salud. Para esto lo mejor es consultar con un nutricionista, aunque hay 2 puntos que se deben cumplir siempre.
- Consumo de alimentos reales y desechar los procesados.
- Planificación de las comidas y cenas de la semana.
Derecho al descanso
El artículo 24 de la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948 informa que “Toda persona tiene derecho al descanso, al disfrute del tiempo libre, a una limitación razonable de la duración del trabajo y a vacaciones periódicas pagadas”.
Por lo tanto, es fundamental garantizar un periodo de descanso que sea efectivo al estar parte del día trabajando, estudiando o cuidando de ciertas personas. Esto hace que se consiga recuperar la vitalidad necesaria para el organismo, además de rendir en la vida cotidiana.
Hacer meditación
La meditación se debe realizar unos 15 minutos al día y requiere de 5 premisas:
- Atención: poder centrarse en lo que se requiere.
- Paciencia: “la cura” se realiza al ritmo que se necesita.
- Escucha: saber reconocer las necesidades de cada uno.
- Empatía: tratarse a sí mismo como si fuese alguien de confianza.
- Compasión: aliviar el sufrimiento mental, emocional o corporal.
Controlar los medicamentos
No automedicarse y conocer los efectos secundarios de los medicamentos forma parte del autocuidado.
Controlar la ingesta de los medicamentos es fundamental, por lo que se deben tomar aquellos que prescribe el médico, de lo contrario cada persona puede alterar y deteriorar su organismo.
Estar hidratado
Para finalizar, otro de los ejemplos del autocuidado es la hidratación, que es de especial relevancia no solo en verano sino durante los 365 días del año. Por lo tanto, beber suficiente agua potable de forma efectiva y segura hace que el organismo se encuentre en excelentes condiciones.